Snoopy en el espacio

Charlie Brown siempre da lo mejor de sí mismo, pero las cosas nunca le salen como espera.  Entrena al peor equipo de béisbol del barrio, un árbol se come todas sus cometas y no consigue armarse de valor para hablar con la chica pelirroja que tanto le gusta. Sin embargo, estos problemas no impiden que sea un buen hermano mayor, un excelente amo de su mascota y el tipo afable al que todo el mundo adora.

Snoopy es la mascota de Charlie Brown y el beagle más famoso del barrio. Snoopy se considera a sí mismo una leyenda capaz de surcar los cielos como un piloto de la Primera Guerra Mundial, ser el alumno más molón de la universidad o publicar un libro como un escritor famoso en el mundo entero. Aunque su imaginación sin límites lo lleva por todo el mundo, siempre vuelve a su caseta a la hora de cenar para estar con su amo, al que conoce como “cabeza de chorlito”.

Las alitas de Woodstock no le permiten hacer vuelos de larga distancia, pero por suerte para él siempre acaba aterrizando en la caseta de Snoopy. Woodstock es el mejor amigo de Snoopy, además de su fiel mecánico cuando es un piloto de la Primera Guerra Mundial, su secretario de estado cuando es el presidente de todos los perros del mundo y su compañero de juerga cuando salen a beber zarzaparrilla en Nochevieja. Woodstock siempre está al lado de Snoopy, y todo parece indicar que así seguirá siendo.

La inteligencia artificial de la NASA que interactúa con Snoopy y sus amigos en el Centro Espacial Johnson y la Estación Espacial Internacional.