Queríamos que cargar el Apple Watch fuera lo más fácil del mundo. Por eso creamos una solución que combina nuestra tecnología MagSafe con la carga inductiva. Se trata de un sistema completamente sellado en el que ningún contacto queda expuesto. Y es superpráctico, porque ni siquiera necesita una alineación perfecta. Solo tienes que acercar el conector a la cara interna del reloj y los imanes se encargan del resto.