El App Store evitó operaciones potencialmente fraudulentas por valor de más de 1.500 millones de dólares en 2020

Apple toma medidas contra los desarrolladores y los usuarios fraudulentos para que el App Store siga siendo un lugar seguro y de confianza para los clientes.

Las amenazas de seguridad han existido desde el día en que se estrenó el App Store para el iPhone y han ido aumentando su escala y su nivel de sofisticación con el paso de los años. Por esa razón, Apple ha estado poniendo en marcha cada vez más mecanismos para hacer frente a dichas amenazas e impedir que pongan en peligro tanto a los usuarios como a los desarrolladores.

Hay que invertir una cantidad considerable de recursos para evitar que la información de los usuarios, como la ubicación y los datos de pago, caigan en malas manos. Aunque es imposible anticiparse a todos los fraudes y las actividades maliciosas, los expertos coinciden en que, gracias a las iniciativas antifraude líderes en el sector de Apple, el App Store es el lugar más seguro para buscar y descargar apps.¹

Solo en 2020, la combinación de tecnología puntera y experiencia profesional de Apple protegió a los usuarios de posibles operaciones fraudulentas por valor de más de 1.500 millones de dólares. Además de impedir el uso indebido de su dinero, su información y su tiempo, la empresa logró mantener casi un millón de apps peligrosas y vulnerables fuera de su alcance.

El equipo encargado de evaluar las apps es una importante línea defensiva. Estas personas analizan minuciosamente cada app y cada actualización para asegurarse de que cumplan las estrictas directrices del App Store en cuanto a privacidad, seguridad y envío de mensajes no deseados. Estas directrices han ido cambiando con el tiempo para adaptarse a nuevas amenazas y dificultades con un único objetivo: proteger a los usuarios y seguir ofreciéndoles la mejor experiencia en el App Store.

Apple quiere que las nuevas apps lleguen al App Store. En 2020, su equipo ayudó a más de 180.000 desarrolladores nuevos a lanzar sus propuestas. Sin embargo, no siempre lo consiguen a la primera. Cuando una app se envía para su aprobación, existe la posibilidad de que esté sin terminar, que no funcione correctamente o que carezca de los mecanismos necesarios para moderar el contenido generado por los usuarios. En 2020, casi un millón de apps problemáticas y un millón de actualizaciones se rechazaron o eliminaron por esos y otros motivos.

Una parte pequeña pero importante de todas esas apps se rechazó porque podían resultar dañinas para los usuarios o perjudiciales para su experiencia, lo que supone un incumplimiento flagrante de las directrices. Solo en 2020, el equipo de evaluación rechazó más de 48.000 apps porque contenían prestaciones ocultas o sin documentar y más de 150.000 porque enviaban mensajes no deseados, copiaban a otras apps o manipulaban a los usuarios para hacer compras.

Algunos desarrolladores utilizan sus apps como cebo y cambian su funcionamiento después de la evaluación para saltarse las normas y llevar a cabo acciones prohibidas e incluso delictivas. Cuando descubrimos una de esas apps, la rechazamos o la eliminamos directamente del App Store y avisamos al desarrollador de que tiene 14 días para apelar la decisión antes de que cancelemos su cuenta de forma permanente. En 2020, cerca de 95.000 apps se eliminaron del App Store debido a maniobras fraudulentas como las descritas anteriormente. 

Sin ir más lejos, en los últimos meses Apple ha rechazado o retirado apps que cambiaban sus funciones tras la evaluación inicial para ofrecer apuestas con dinero real, préstamos con condiciones abusivas o contenidos pornográficos, enviar señales dentro de juegos para facilitar la compra de drogas, y recompensar a los usuarios por retransmitir contenidos ilegales o pornográficos por chat de vídeo.

Otras de las razones más habituales por las que se rechazan apps es porque piden a los usuarios más información de la que necesitan o tratan sus datos de formas poco adecuadas. En 2020, el equipo de evaluación de apps rechazó más de 215.000 por problemas de privacidad como estos. Apple cree que la privacidad es un derecho fundamental y uno de los motivos por los que los usuarios eligen el App Store. 

No obstante, en el App Store hay 1,8 millones de apps, por lo que estos problemas pueden surgir a pesar de estas estrictas medidas de seguridad. Si detectan un problema, los usuarios pueden informar de ello en el App Store o llamar al Soporte de Apple. Los desarrolladores pueden utilizar cualquiera de estos métodos y acceder a otros canales, como el Asistente de Opinión y Apple Developer Support.

Las valoraciones y las reseñas del App Store ayudan a muchos usuarios a decidir qué apps descargar, y los desarrolladores las consultan para incorporar nuevas prestaciones y estar al tanto de las opiniones de los clientes. Apple utiliza un sistema muy sofisticado que combina el aprendizaje automático, la inteligencia artificial y la intervención humana para moderar estas valoraciones y reseñas de forma que sean realistas y de fiar. Desde 2020, Apple ha procesado más de 1.000 millones de valoraciones y más de 100 millones de reseñas. De todas ellas, más de 250 millones se han eliminado por no cumplir las normas de moderación.

Hace poco, Apple ha empezado a utilizar nuevas herramientas para comprobar la autenticidad de las cuentas que envían valoraciones y reseñas, analizar las reseñas escritas en busca de indicios de fraude y garantizar que se elimina el contenido de las cuentas desactivadas.

Por desgracia, algunas cuentas de desarrolladores se crean con fines fraudulentos. Si un desarrollador incumple las normas de manera flagrante o reincide, se le expulsa del Apple Developer Program y su cuenta se cancela. En 2020, Apple cerró 470.000 cuentas y rechazó la inscripción de 205.000 desarrolladores sospechosos, lo que impidió que enviaran apps potencialmente fraudulentas al App Store.

A pesar de que estas entidades utilizan técnicas avanzadas para camuflar sus actividades, la supervisión exhaustiva de Apple logra que estas cuentas se cancelen en un periodo normalmente inferior a un mes desde el momento de su creación. 

El trabajo de Apple para garantizar la seguridad de los usuarios que descargan apps va más allá del App Store. En los últimos 12 meses, Apple ha detectado y bloqueado cerca de 110.000 apps ilegítimas de tiendas enfocadas a la piratería. Estas tiendas distribuyen software malicioso que suele estar diseñado para parecerse a apps populares o que modifica otras apps sin el consentimiento de sus desarrolladores con la intención de saltarse las protecciones de seguridad del App Store.

En el último mes, Apple detuvo más de 3,2 millones de intentos de distribución ilegales de apps a través del Apple Developer Enterprise Program. Este programa está pensado para que empresas y otras organizaciones puedan desarrollar apps y distribuirlas entre empleados de forma privada. Las entidades fraudulentas intentan distribuir apps por este método para saltarse el riguroso proceso de evaluación de apps o implicar a las empresas legítimas. Para ello, manipulan a alguien de dentro para que filtre las credenciales necesarias para distribuir contenidos ilícitos.

Apple no solo trabaja para identificar y desactivar las cuentas fraudulentas de desarrolladores, sino también las de usuarios. Solo en 2020, Apple canceló 244 millones de estas cuentas por actividades abusivas y fraudulentas. Además, rechazó 424 millones de intentos de creación de cuentas porque mostraban indicios de este tipo de actividades.

La información financiera y las transacciones están entre los datos más delicados que los usuarios comparten online. Apple ha invertido una cantidad considerable de recursos en la creación de métodos de pago más seguros como Apple Pay y StoreKit, utilizados por más de 900.000 apps para vender bienes y servicios en el App Store. Por ejemplo, los números de las tarjetas de crédito no se comparten con los comercios al utilizar Apple Pay, lo que elimina un factor de riesgo durante los procesos de transacción.

Por desgracia los filtrados de datos online son muy frecuentes, así que estas medidas de protección son fundamentales para mantener la seguridad de los usuarios. No obstante, muchos de ellos no son conscientes de que, cuando las entidades fraudulentas roban los datos de su tarjeta de crédito de otros lugares, pueden utilizarlos en tiendas online como el App Store para comprar bienes y contenidos digitales con fines ilícitos como el blanqueo de dinero.

Apple también lucha sin descanso contra este tipo de fraude. Solo en 2020, la combinación de tecnología de vanguardia e intervención humana impidieron que más de tres millones de tarjetas obtenidas de forma indebida se utilizaran para comprar bienes y servicios robados. Además, se cancelaron aproximadamente un millón de cuentas para impedir que volvieran a hacer transacciones. En total, Apple protegió a los usuarios frente a operaciones potencialmente fraudulentas por valor de más de 1.500 millones de dólares en 2020.

Desde la evaluación de las apps hasta la detección de cuentas fraudulentas, pasando por la prevención de delitos financieros, Apple trabaja sin descanso para que el App Store siga siendo un lugar seguro y de confianza tanto para los usuarios como para los desarrolladores.